Lucena, ciudad educadora. Proyecto Intercentros. Por Bernardo Palacios, director del CEIP Al-Yussana de Lucena.
Bajo el nombre de “Lucena, ciudad educadora” se viene desarrollando en nuestra localidad desde el curso 2006-2007 un proyecto intercentros de la Red “Escuela, espacio de paz” en el que participan en su totalidad los colegios de Infantil y Primaria y los institutos de Secundaria, Bachillerato y Ciclos Formativos; se incluyen en el mismo, además, los centros de las pedanías de Las Navas del Selpillar (CEIP “San Francisco”) y de Jauja (CEIP “Genil”), así como la Residencia Escolar “Miguel Álvarez de Sotomayor”, el centro de Educación Especial “San Jorge”, la Escuela Oficial de Idiomas y el centro privado concertado “La Purísima”. Son, pues, un total de 19 centros los que participan en este proyecto, que abarca a la totalidad de la comunidad educativa del municipio y que nació gracias a la confianza y al firme apoyo del Servicio de Inspección, a través de la persona de D. Francisco Cuadrado, inspector de zona que impulsó la idea, y al convencimiento de un grupo de directores y directoras que no solo creían en el trabajo en equipo y en la capacidad de consenso a pesar de las diferencias, sino que compartían la preocupación por cómo fomentar una educación en valores con capacidad para generar una auténtica “cultura de paz”.
En esos momentos casi todos los centros participaban ya a título individual en la red desde hacía algunos cursos, pero se entendió que era necesaria una actuación conjunta, que se coordinara con las instituciones locales, especialmente con el Ayuntamiento, si se querían desarrollar políticas que ayudaran a acercar a la población los valores democráticos y los derechos humanos, por lo que entre las principales finalidades del proyecto se incluyeron: potenciar la educación en valores y generar actitudes positivas ante al civismo, la justicia, la igualdad o la interculturalidad; intentar provocar un cambio en problemas como la exclusión o la discriminación de determinados sectores de población (inmigrantes, familias desfavorecidas…); sensibilizar sobre la cultura de paz a los centros educativos, autoridades, asociaciones de madres y padres, medios de comunicación y opinión pública, en general; y mejorar el clima de convivencia en centros y aulas incrementando, así, los rendimientos académicos del alumnado, proporcionando herramientas para la resolución pacífica de conflictos.
Se participaba de la idea de que el derecho a la educación suponía construir espacios educativos en los que cada persona se sienta valorada y aceptada, y en donde la colaboración se imponga a las jerarquías, desde el diálogo y la cooperación, a todos los niveles y entre todos los sectores de la comunidad educativa. A su vez, el proyecto tenía en cuenta los cuatro pilares básicos de la educación mencionados en el Informe Delors (elaborado a petición de la UNESCO): “aprender a conocer, aprender a ser, aprender a hacer y aprender a convivir juntos”. Desde el princuipio ha pretendido trascender el marco escolar buscando la participación de todos los agentes que rodean la vida del alumnado en el municipio, coordinando sus actuaciones, sistematizando su desarrollo y proyectándolas en nuestro entorno.
Se participaba de la idea de que el derecho a la educación suponía construir espacios educativos en los que cada persona se sienta valorada y aceptada, y en donde la colaboración se imponga a las jerarquías, desde el diálogo y la cooperación, a todos los niveles y entre todos los sectores de la comunidad educativa. A su vez, el proyecto tenía en cuenta los cuatro pilares básicos de la educación mencionados en el Informe Delors (elaborado a petición de la UNESCO): “aprender a conocer, aprender a ser, aprender a hacer y aprender a convivir juntos”. Desde el princuipio ha pretendido trascender el marco escolar buscando la participación de todos los agentes que rodean la vida del alumnado en el municipio, coordinando sus actuaciones, sistematizando su desarrollo y proyectándolas en nuestro entorno.
Echando una mirada hacia atrás se puede concluir que este proyecto intercentros ha tenido continuidad a lo largo de todos estos años (incluso permaneció activo a nivel interno durante los 2 años en que la red dejó de estar en funcionamiento) en base a algunas estrategias que han permitido la consecución de sus objetivos y lo han dotado de utilidad para sus integrantes:
• Trabajo en equipo: la coordinación, en manos de un centro de primaria y otro de secundaria, ha rotado por los distintos centros cada dos cursos académicos; el trabajo se ha dividido en comisiones (agenda escolar, actividades, difusión, relaciones institucionales, desarrollo de documentación, selección y elaboración de materiales…); los recursos elaborados por cada centro se han compartido entre todos; se han consensuado y elaborado documentos planificadores comunes (planes de convivencia, protocolos de tránsito, indicadores de evaluación…).
• Apoyo al proyecto de cada centro: el nombramiento de los coordinadores/as ha tenido en cuenta el adecuado perfil que se necesitaba y ha venido acompañado de una asignación horaria específica para su cometido, reflejada en un horario de reuniones; se ha mantenido la atención presupuestaria suficiente para abordar los gastos derivados de las actividades comunes previstas (que han tratado de ser proporcionales al volumen de sus participantes); inclusión de los objetivos y actividades comunes acordadas en las planificaciones de cada centro.
• Compromiso de los coordinadores/as de cada centro, principales artífices de que el proyecto haya venido funcionando con la calidad y dinamismo que lo ha hecho.
• Calidad de los materiales y actividades realizadas: agenda escolar compartida anualmente por más de 6000 escolares de 1º de primaria a 4º de ESO desde hace 8 cursos, que sirve como medio de comunicación con las familias y es vehículo de transmisión de valores; difusión de decálogos a través de cartelería; gymkhana en el día de la paz y celebración de otras efemérides significativas (juegos colectivos para el Día de la Infancia, manifiesto contra la violencia de género, talleres para el Día del Medio Ambiente…); otras actividades comunes (olimpiadas interescolares, campeonatos deportivos, concursos, cuestionarios…).
• Apoyo institucional: en el que destaca la firme apuesta por el proyecto hecha desde el Ayuntamiento de Lucena y sus delegaciones, especialmente las de Educación, Cultura, Igualdad, Medio Ambiente y Servicios Sociales, con independencia de las personas o partidos que han ido pasando por los cargos; el de las AMPAs de todos los centros y el de la Federación SURCO; el de empresas y organismos que han participado económicamente patrocinando actividades; el de la Delegación Provincial de Educación, y en concreto del Gabinete de Paz, la Inspección y el CEP de Priego-Montilla…
Y de aquí en adelante, nuestro deseo es el de seguir trabajando juntos, haciendo visible la PAZ, sacándola de nuestros centros y convirtiéndola en un bien común, para que con ello sigamos ayudando a cada uno de nuestros alumnos/as a ser mejores personas, las mejores posibles.
• Trabajo en equipo: la coordinación, en manos de un centro de primaria y otro de secundaria, ha rotado por los distintos centros cada dos cursos académicos; el trabajo se ha dividido en comisiones (agenda escolar, actividades, difusión, relaciones institucionales, desarrollo de documentación, selección y elaboración de materiales…); los recursos elaborados por cada centro se han compartido entre todos; se han consensuado y elaborado documentos planificadores comunes (planes de convivencia, protocolos de tránsito, indicadores de evaluación…).
• Apoyo al proyecto de cada centro: el nombramiento de los coordinadores/as ha tenido en cuenta el adecuado perfil que se necesitaba y ha venido acompañado de una asignación horaria específica para su cometido, reflejada en un horario de reuniones; se ha mantenido la atención presupuestaria suficiente para abordar los gastos derivados de las actividades comunes previstas (que han tratado de ser proporcionales al volumen de sus participantes); inclusión de los objetivos y actividades comunes acordadas en las planificaciones de cada centro.
• Compromiso de los coordinadores/as de cada centro, principales artífices de que el proyecto haya venido funcionando con la calidad y dinamismo que lo ha hecho.
• Calidad de los materiales y actividades realizadas: agenda escolar compartida anualmente por más de 6000 escolares de 1º de primaria a 4º de ESO desde hace 8 cursos, que sirve como medio de comunicación con las familias y es vehículo de transmisión de valores; difusión de decálogos a través de cartelería; gymkhana en el día de la paz y celebración de otras efemérides significativas (juegos colectivos para el Día de la Infancia, manifiesto contra la violencia de género, talleres para el Día del Medio Ambiente…); otras actividades comunes (olimpiadas interescolares, campeonatos deportivos, concursos, cuestionarios…).
• Apoyo institucional: en el que destaca la firme apuesta por el proyecto hecha desde el Ayuntamiento de Lucena y sus delegaciones, especialmente las de Educación, Cultura, Igualdad, Medio Ambiente y Servicios Sociales, con independencia de las personas o partidos que han ido pasando por los cargos; el de las AMPAs de todos los centros y el de la Federación SURCO; el de empresas y organismos que han participado económicamente patrocinando actividades; el de la Delegación Provincial de Educación, y en concreto del Gabinete de Paz, la Inspección y el CEP de Priego-Montilla…
Y de aquí en adelante, nuestro deseo es el de seguir trabajando juntos, haciendo visible la PAZ, sacándola de nuestros centros y convirtiéndola en un bien común, para que con ello sigamos ayudando a cada uno de nuestros alumnos/as a ser mejores personas, las mejores posibles.
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